Las células madre pluripotentes inducidas han aparecido en las noticias un poco más tarde, específicamente en el verano con un informe de dos estudios chinos que demostraron que las células madre provenientes de las células de la piel de ratones adultos tenían la capacidad de regenerarse de una forma muy similar a las células madre embrionarias, lo cual resultó, en ambos casos, en el nacimiento de un ratón bebé.
Aparentemente las células de la sangre de cordón pueden reprogramarse de una forma muy similar a las células madre adultas en esos estudios, pero con menos factores y en menos tiempo, según el Dr. Juan Carlos Izpisúa Belmonte, profesor del Laboratorio de Expresión Genética del Instituto Salk, quien condujo su propio estudio publicado en la edición de octubre del periódico Cell Stem Cell.
Esta noticia deja sin efecto un argumento en contra del uso de células madre de la sangre de cordón propias de una persona, donadas a un banco para tratar enfermedades: que las células madre pueden tener la misma mutación genética, o pueden estar predispuestas a la mutación, que coloca a la enfermedad en primer lugar. Por medio de la reprogramación de células madre de sangre de cordón, sin embargo, los científicos quizás pueden eliminar la posibilidad de que esto vuelva a suceder.