La sangre del cordón contiene células madre que pueden salvar vidas
La sangre que queda en el cordón umbilical luego del nacimiento de un bebé, y después de haberse cortado el cordón, se conoce como sangre del cordón. La sangre del cordón es la única que ofrece una forma no controvertida, rápida e indolora de obtener células madre. Aún más importante, estas células madre pueden reconstruir un sistema inmunológico y tienen la capacidad de tratar, reparar o reemplazar células afectadas del cuerpo. La sangre del cordón cuenta con una gran cantidad de células madre hematopoyéticas, que son células madre generadoras de sangre, similares a las que se encuentran en la médula ósea.
La sangre del cordón ofrece varias ventajas para donantes y receptores de trasplantes, en comparación con la médula ósea. Es mucho más fácil de extraer, a menudo tiene una mayor probabilidad de brindar una compatibilidad adecuada que las células madre de la médula ósea, y se almacena congelada para su uso. Si bien un trasplante de médula ósea requiere una compatibilidad paciente-donante 6 de 6 (o del 100%), estudios demuestran que los trasplantes de sangre del cordón tienen el mismo éxito con una compatibilidad paciente-donante 4 de 6 (o del 67%). En la actualidad, las células madre de la sangre del cordón se utilizan para tratar a pacientes con enfermedades del sistema inmunológico y de la sangre, entre ellas la leucemia y los linfomas.
Datos sobre la sangre del cordón
Probabilidad de compatibilidad exacta con un miembro de la familia:
- Compatibilidad para donante/niño = 100%
- Compatibilidad para padre = 50%
- Compatibilidad para hermano = 25%